jueves, 14 de marzo de 2013

Palabras de María Cepeda Castro en el foro La paz, la democracia y la participación política en Colombia

Palabras de María Cepeda Castro en el foro sobre el tema: La paz, la democracia y la participación política en Colombia convocado por fundación alternativa en Barcelona el  13.03.13 (Dones teixint la Pau) Cap a la Pau a Colombia)




AVE FENIX
¿Y por qué
no escapaste
cuando cayeron Jaime,
Leonardo,
Miller?
¿Cuándo Teófilo partió en un viaje sin retorno
y Antequera entró en el aeropuerto
y Bernardo lanzó su última sonrisa?
Y cuando aquel desconocido (labriego, obrero, estudiante)
Dijo: -Aquí luché, aquí me muero-.
Y murió.


No hablamos de la cacería del tigre
ni de la flecha contra el águila
sino de un genocidio a la luz del día,
del racimo entregado al sacrificio,
de abuelos, nietos, hijos, madres
que en vano anhelaron tu regreso.


…Los árboles
transmiten sus semillas
en el aire.
Las lanzas de Bolívar,
las luciérnagas
de Policarpa
y el aullido
de los libertadores
resucitan con niebla
en la hondonada.


Tras la pared de fusilados
invencibles retoñan
los geranios
y deidades anónimas
bautizan callejuelas
del mercado.


¿Quizás el exilio
Nos habría salvado?
¿Tal vez el asilo
preservaría a Jaime y a Leonardo
cuando el palacio
armó la mano del esbirro?


Dejemos al examen del futuro
el error de la lucha, si era bueno
acudir a la cita, si era mejor agazaparse, si el tejido
del tapete gigante debería
llevar un hilo de oro o de topacio
en lugar del cabello aniquilado.


Pero
no teorices
sin medir el esfuerzo, la titánica
labor que hace la ola en el océano
ni consigas el titulo con tesis
bien (mal) pagadas
sobre la tumba de los mártires.
Sube un rayo
de luz anunciadora,
una espuma veraz
del fondo oceánico
desde la sencillez
de Jaime Pardo.


(Manuel Cepeda Vargas)




Manuel Cepeda Vargas fue el último senador de la Unión Patriótica, murió asesinado en las calles de Bogotá el 9 de agosto de 1994. Concluía así uno de los episodios más dolorosos de la historia colombiana reciente. Era el “cierre de oro” a lo que se llamó “el baile rojo”, “el plan golpe de gracia”.


Había visto a mi padre por última vez en el verano de ese mismo año, cuando vino a vernos a Grecia, aprovechando una visita suya a Europa. Me contó que las cosas no andaban bien, que la amenazas se habían recrudecido y la situación se hacía inaguantable, que ya eran muchos los y las camaradas caídos. Que el gobierno no respondía y que a pesar de que una comisión del partido había estado visitando al entonces ministro de gobierno para denunciar la existencia de ese plan de extermino, plan que consistía en una lista pormenorizada de nombres, el gobierno no daba crédito a las denuncias.


La Unión Patriótica surgió en el año de 1984, producto de las conversaciones de Paz entre el gobierno de Belisario Betancur y la guerrilla de las FARC. Surgió como una salida política que permitiría la consolidación del proceso de PAZ y la participación del movimiento guerrillero en la vida política nacional.


Fue aniquilada casi en su totalidad dejando como saldo más de 4.000 víctimas (asesinatos), un sinnúmero de refugiados, exiliados y de familias descuadernadas. El caso de la UP es el más emblemático de la falta de garantías para el ejercicio político en Colombia.


Para la oposición, los movimientos sociales, el ejercicio político ha sido planteado en desigualdad de condiciones, es muy común que se utilice la estigmatización, los señalamientos, las capturas arbitrarias, la falta de regulación para el ejercicio de la oposición y la violencia del terrorismo de Estado en complicidad con el paramilitarismo. El sistema electoral actual que tiene profundas deficiencias, es un sistema que no brinda transparencia, un sistema obsoleto, con el cual se presentan fraudes y también distintas manipulaciones de los resultados electorales. Es necesario revisar las medidas penales contenidas en “la seguridad democrática” y en “el Estatuto de seguridad ciudadana” , medidas que criminalizan la protesta y la movilización social.


Para la construcción de La PAZ es primordial que existan unos mínimos que garanticen y reconozcan las distintas formas de hacer política sin armas, todas las expresiones del movimiento social y sobre todo de la creación de una estructura estatal que haga presencia en las zonas más afectadas del conflicto. Serán necesarias reformas estructurales y en la propia constitución. La creación de un estatuto de oposición que garantice el ejercicio de la participación política democrática tica tanto en el campo como en la ciudad. Eso implica el desmantelamiento de los aparatos paraestatales que han sido fuente de antidemocracia y violencia. Esas estructuras han garantizado el poder a sectores oligárquicos del país. Han ejercido el poder para tratar de silenciar a la oposición por medio de masacres, desaparición forzada, asesinatos selectivos y ahora en su última modalidad que es expropiándoles los terrenos a los campesinos cuando se les son devueltos.



A MODO DE CONTEXTO


Colombia no es un país violento por sí, es en la desigualdad, la mala distribución de la tierra donde nace la violencia.


Hablar de los orígenes del conflicto colombiano requiere ver algunas cifras y echar una mirada al campo, donde los niveles de pobreza, miseria son muy altos. La población colombiana es de 46 millones de habitantes de los cuales, según la CEPAL, 30 millones son pobres, 12 millones se encuentran viviendo en la pobreza absoluta. El 10 % de la población se encuentra migrada en el extranjero.


El conflicto colombiano lleva muchas décadas. Hay analistas que dicen que son más de cien años, otros hablan de que comenzó con el Bogotazo en el año 48 y otros dicen que fue en el 61 con la toma de Marquetalia. La verdad es que son muchos años de dolor donde la calidad de vida de las poblaciones rurales se ha pauperizado. El desastre ecológico es de gran envergadura. A minería irresponsable es un despilfarro de agua y recursos naturales. La entrega de concesiones al capital extranjero y las grandes transnacionales que explotan la tierra y que en muchos casos han financiado grupos de autodefensas para ahuyentar a los pobladores de ciertas regiones y así hacerse a las tierras.


La cifra de muertos, desaparecidos y desplazados que ha dejado, no se conoce con exactitud. El paramilitarismo sigue actuando a sus anchas, sus estructuras no han sido desarticuladas simplemente rebautizadas y el más grande paramilitar, el señor Uribe Vélez, a pesar de las denuncias que existen contra él y su familia, sigue fuera de la cárcel.


En este contexto y después de muchos intentos de dialogo, La Uribe, Tlaxcala y Caracas, El Caguán, por fin se ve la luz de una salida pacífica al conflicto.



Desde el mes de octubre del 2012, con unos acercamientos y pre diálogos de casi un año, se han iniciado las conversaciones de PAZ en la Habana. Con el planteamiento de una agenda muy sencilla de cinco puntos, las conversaciones van por buen camino.

A pesar de que el gobierno de Juan Manuel Santos había dicho categóricamente que allí no participarían sino las dos partes, es decir gobierno y las guerrillas de las FARC. La sociedad civil ha logrado un espacio para plantear cuestiones que enriquezcan la agenda y ayuden a resolver problemas esenciales, está igualmente jugando un papel muy importante, primero en Colombia atravez de "La Ruta Social Común por La PAZ", atravez  de los cabildos regionales, de los consejos y mesas regionales de PAZ y de las recientemente instaladas constituyentes regionales por la PAZ.


Si bien es cierto que el gobierno ha dicho: que en las mesas participan solo las dos partes: gobierno y FARC, la sociedad civil se está manifestando de manera muy propositiva desarrollando muchas iniciativas.


El primer garante de un proceso de PAZ exitoso es la misma Sociedad Civil.



A dónde van los diálogos?

Podemos decir que en este momento y a pesar de las dificultades, las conversaciones se han afianzado, las dos partes se conocen mucho mejor y existe una dinámica de trabajo.
Ya comenzó la séptima ronda de diálogos, en donde deberán concluir los acuerdos relacionados al tema de desarrollo agrario integral y se aborde de fondo lo que sería la participación política de las FARC.



La Paz requiere de un movimiento muy fuerte que sirva de coraza y la proteja, en este movimiento deben participar todas las fuerzas que se sientan dolientes de este proceso. La comunidad internacional juega un papel muy importante en este sentido, tanto como garantes y acompañantes de los diálogos: Noruega, Cuba, Venezuela y Chile.


En Europa existen muchos movimientos de solidaridad y por la PAZ de Colombia. Formas organizativas que están integradas por extranjeros y colombianos migrantes, exiliados que llevan muchos años desarrollando una labor de denuncia y apoyo. Han demostrado que es mucho lo que se puede hacer desde afuera.


Nosotros como migrantes, como exiliados víctimas de este conflicto, pensamos que podemos tener un lugar donde poder plantear nuestra problemática, hacer un aporte y visibilizar el drama de tantas y tantos compatriotas. Hemos propuesto la creación de "La Plataforma Europea por La PAZ". Por su carácter amplio es también un llamado a la UNIDAD. Un espacio donde puedan confluir varias fuerzas, dinámicas, partidos, organizaciones y personas interesadas en el tema de LA PAZ.


La plataforma surge en Oslo, en el marco de la apertura de las mesas de negociación en octubre del año pasado. Y surge como un ejercicio pedagógico con un buen eco en varias capitales europeas. Se ha tratado hasta ahora de la realización de eventos públicos de presentación del documento de Oslo donde se reafirma el compromiso de que en Colombia se logre un acuerdo de la finalización del conflicto.


Ustedes compañeros han convocado la plataforma “Colombia in Pau” aquí en Barcelona como un ejercicio amplio, la cual ha sido planteada de una manera muy unitaria que permite unificar fuerzas y proponer temas de consenso.


Como ya lo dije todos estos esfuerzos tiene un único propósito que es rodear los esfuerzos por la PAZ en Colombia.


Muchas gracias por su atención y una vez más agradecer por esta oportunidad.

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