lunes, 6 de octubre de 2008

Ponencia del estatuto de víctimas es un retroceso.



La Ley de Víctimas que había sido aprobada en la legislatura pasada en el Senado, fue severamente peluqueada en la Cámara.

Con la ponencia de dos congresistas de la bancada de gobierno, parece que la situación de las víctimas y sus familias podría empeorar, en lugar de mejorar.
El proyecto del Estatuto de Víctimas elaborado por el Gobierno y radicado en la Cámara de Representantes deja a las víctimas en peores condiciones de las que tienen ahora.

“Este texto me parece absolutamente retrógrado y aparte me parece que desilusiona, desconcierta y por supuesto produce mucha desconfianza”

La “perla” está en el artículo 73 de la ponencia, que plantea como “inconveniente” sujetar a las Fuerzas Armadas al control civil.

“Dice que se considera inconveniente que las Fuerzas Armadas estén bajo control civil. ¿Cómo dos representantes a la cámara firman un texto contrario a los principios constitucionales?”
“Significa cubrir con un manto de oscuridad, significa excluir la verdad, excluir la memoria histórica de las acciones de la Fuerza Pública.”

Adicionalmente, la propuesta del Gobierno excluye a las víctimas de los crímenes de Estado. El ponente de la otra iniciativa que ya inició su estudio en la Comisión Primera de la Cámara, dio como ejemplo a las madres de los jóvenes desparecidos de Soacha y aparecidos muertos en Ocaña.

“Tendrían que esperar una condena que podría tardar entre diez y quince años para que les sean reconocidos sus derechos de reparación”

El Gobierno dice que la ley conserva la esencia de lo aprobado en el Senado.

“Queremos el mejor instrumento, se ha planteado un estatuto muy complejo, muy completo”
El próximo martes comenzará la discusión de los dos debates en la comisión primera de la Cámara de Representantes y allí se definirá cuál es el compromiso real del gobierno en torno a las víctimas.

Con los miembros de la comunidad de San José de Apartadó
Por: Mayela Barragán Zambrano
“Ya no tiene sentido hacer denuncias de los crímenes ante la Fiscalía o ante los procuradores del Estado colombiano”

"Destapan fosas comunes de campesinos y el gobierno no hace nada concreto para juzgar a los autores de estos crímenes que bien se sabe son los paramilitares. En Colombia militarismo y paramilitarismo son el mismo verbo mal conjugado", sostiene María Berthilda Tuberquia Quintero, mienbro de la comunidad de paz de San José de Apartadó fundada en 1997 por iniciativa del Obispo Isaía Duarte Cancino, quien fue asesinado poco más tarde por los Narcos. Así empieza Berthilda su conversación y a continuación cita las siguientes palabras del Presidente Uribe que, refiriéndose a las gentes de las comunidades de paz, ha dicho: "si no los hemos acabado a tiros, los acabaremos con los planes de acción social”. Siga..

No hay comentarios:

Publicar un comentario