Mientras la justicia norteamericana establece penas de 20 años para los criminales paramilitares colombianos,responsables de los más graves delitos de lesa humanidad y cómplices de los uribistas, endurece aún más las condicionesde cautiverio para Simón Trinidad,condenado a sesenta años de cárcel por un delito que no cometió (secuestro de los tres agentes norteamericanos recién liberados).
Hace pocos días fue trasladado a una penitenciaríaaislada en las montañas de Florence(Colorado), la cual está bajo el régimende máxima seguridad ADX deEstados Unidos. Estas ‘prisiones sonconocidas como «Supermax» y soncalabozos modernos en donde los prisioneros están aislados de todo contacto humano y con el mundo exterior. Varias ONG las han definidocomo degradantes.
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