sábado, 18 de diciembre de 2010

Nuevo fallo de la corte suprema de justicia en favor de la senadora Gloria Inés Ramírez Ríos

Senadora del Polo Democrático Alternativo, Gloria Inés Ramírez Ríos.
Por segunda vez la Corte Suprema de Justicia produjo un fallo declarando la inocencia de la Senadora del Polo Democrático Alternativo, Gloria Inés Ramírez Ríos. En la primera ocasión se pretendió armar contra ella el montaje de la llamada “Farcpolítica”, con base en supuestos documentos hallados en los computadores cuya propiedad se atribuyó al comandante de las FARC “Raúl Reyes”, copias de los cuales fueron enviadas por la Fiscalía General de la Nación a la Corte para que adelantara la respectiva investigación. En un contundente fallo, la Corte suprema de Justicia ordenó archivar el expediente.

David Rabelo: Emblematico defensor de ddhh del Magdalena medio es privado de su libertad

David Rabelo:  Emblematico defensor de ddhh del Magdalena medio es privado de su libertad
DAVID RABELO, reconocido defensor de derechos humanos del Magdalena Medio colombiano, fue privado de su libertad en el marco de un particular proceso judicial en su contra. Esta captura se da después de un incremento de las amenazas y hostigamientos en su contra. A pesar de pronunciamientos de organizaciones de derechos humanos nacionales e internacionales, denuncias públicas, cartas al gobierno nacional, videos, noticias y otras acciones denunciando su situacion de riesgo, este defensor es víctima de una nueva agresión. 

Campaña Internacional Libertad para los 7.500 Presos Políticos en Colombia Colombia

Colombia
Las desapariciones de los desaparecidos:
38.255 desaparecidos en 3 años
2007........   4.323
2008.......  15.696
2009...... . 18.236
Total........ 38.255     “En el 2007 se reportaron oficialmente 4.323 personas desaparecidas. En el 2008, 15.696 y la cifra ha venido creciendo significativamente: 18.236 casos en el 2009, para un total de 38.255 personas reportadas como desaparecidas (en 3 años)”. Informe medicina Legal, mayo 2010.

FCSPP conoce información de montaje judicial que se está armando contra el abogado Leonardo Jaimes Marín.

La Fundación Comité de Solidaridad con los presos políticos, a través de una fuente de alta credibilidad, conoció que por parte de funcionarios de la SIJIN, se ha contactado a dos supuestos reinsertados de las FARC para que rindan entrevista judicial en la que incriminen al abogado de nuestra Seccional Santander LEONARDO JAIMES MARIN. Se pretende señalar que nuestro compañero pertenece al Bloque del Magdalena Medio de dicha organización rebelde y relacionarlo con CARLOS IVAN PEÑA ORJUELA, preso político recluido en la cárcel de Palogordo, a quien durante su militancia en la organización guerrillera se le conoció como el comandante CHAPARRO.

sábado, 4 de diciembre de 2010

El Dr. Ramiro Orjuela, abogado defensor de Derechos Humanos


El Dr. Ramiro Orjuela, abogado defensor de Derechos Humanos y de presos(as) políticos(as) en Colombia, denuncia agudización de violaciones del derecho a la vida de niños y niñas en los departamentos de los llanos orientales, detenciones arbitrarias y toda clase de vejámenes contra líderes campesinos que organizaron la audiencia pública sobre fosas comunes  realizada el 22 de julio 2010  en el municipio de la Macarena, Meta.

Testimonio de un preso político, hoy refugiado en Europa

Testimonio de un preso político, hoy refugiado en Europa
Este relato es producto de lo vivido en una cárcel colombiana año 2009, detención producto de una falsa acusación de rebelión, hoy proceso precluido por  inocencia
   
En Colombia  a los opositor@s al régimen, luchadores sociales, dirigentes  sindicales, líderes estudiantiles, dirigentes campesinos, afrodescendientes, indígenas, dirigentes políticos se les califica como “EL ENEMIGO” y se les acusa de TERRORISTAS. Se montan sumarios con pruebas falsas y testigos perjuros que luego desaparecen (FALSO POSITIVO JURÍDICO)  y comienza el tortuoso camino del detenido por razones políticas, por el solo hecho de luchar por un país mejor, con inequidad, sin corrupción y en paz.

sábado, 27 de noviembre de 2010

Memorias del Sumapaz – (III)

GRUPO JUVENIL DE DANZAS DE LA ESCUELA ARTÍSTICA ITINERANTE DEL PÁRAMO DE SUMAPAZ DEL COLEGIO CAMPESTRE JAIME GARZÓN. VEREDA LAS AURAS, CORREGIMIENTO DE NAZARETH. JACQUELINE VEGA, MAGNOLIA AGUDELO, JENNY CRUZ. FOTO. IVÁN DARÍO ALZATE.

Por: Luz Marina López Espinosa

Cuando en febrero de 2006 emprendimos el proyecto de Escuela de Educación Artística, la tarea no era fácil. Había que convencer a docentes y directivos de los colegios sin los cuales la Escuela no era posible, al igual que a los padres de familia. La convocatoria inicial era solo para colegios y niños de 7 a 14 años. Los técnicos que avalaron el proyecto desde los escritorios oficiales, hablaban de hacer miles de volantes, plegables y afiches para esa convocatoria. ¡Empapelar Sumapaz! Lo que no sabían estos planeadores era que habría que abarcar 74 mil hectáreas. Tampoco sabían que el páramo limita con 4 departamentos. Nos hablaban de porcentajes, misiones, visiones. ¡Qué lejos de la realidad estaban! Allí en ese particular espacio, se da es un proceso de aprendizaje que conduce a un descubrimiento de los profesores, los estudiantes y la comunidad, superando la instrumentalización del saber sin desligar el quehacer artístico de los imaginarios locales. Y de esa forma se logró consolidar la propuesta con una cobertura de 90 % de la población escolarizada y 10 % de no escolarizada. Y de ahí salió el carácter de itinerante en contra de lo que desde afuera recomendaban.


1. Colegio Campestre Jaime Garzón

GRUPO DE DANZA INFANTILI DE LA ESCUELA DE EDUCACIÓN ARTÍSTICA ITINERANTE DEL PÁRAMO DE SUMAPAZ DEL COLEGIO CAMPESTRE JAIME GARZÓN, VEREDA LAS AURAS, CORREGIMIENTO DE NAZARETH. FOTO IVÁN DARIO ALZATE.

Cuando nos adentramos en el páramo rumbo a la vereda Las Auras del corregimiento de Nazareth, lo que más nos impresionó fue el retén militar en el área de las lagunas. Barricadas, metrallas y soldados encapuchados con la desconfianza que eso produce, contrastaban con lo paradisíaco del lugar. Los frailejones pugnan por sobrevivir a miles de pisadas de botas a las cuales no están acostumbrados ni para los cuales están hechos. Un centímetro por año es su crecimiento, un frailejón de un metro de altura tarda cien años en crecer y miles de pisadas diarias, cuando no su impiadoso corte para usarlo de abrigo. Es la depredación de este delicado y precioso ecosistema.

En el colegio, los coordinadores Nélida Patiño y Fernando Suárez nos hicieron las recomendaciones pertinentes. Una de ellas, la Escuela sólo se podía realizar los sábados, día poco favorable para que nos asistieran los estudiantes, ya que no tenían clases y la mayoría se dedicaba a las labores del campo. Había que ir por el extenso corregimiento a recogerlos uno a uno. Fernando para facilitarnos el trabajo, nos trazó un mapa donde dibujó cada sitio y las rutas con exactitud. Por eso se convirtió en nuestro cartógrafo. Y llegó el primer sábado de Escuela. De uno en uno se fue llenando el bus, gracias a la paciencia y apoyo de Alvaro Moreno, Alirio Rey y el doctor en lúdica Alberto Motta. Los niños se recogían en la carretera o en el camino más cercano. El único requisito era que quisieran subirse al bus de las artes.

A la vereda Raizal fuimos a buscar estudiantes. La muy sentida Fanny Torres nos apoyaba y con el megáfono de la junta de acción comunal llamaba a participar de la Escuela. Y claro, si ella lo decía, la gente sabía que era bueno. En la escuelita y en el salón comunal de Raizal fue donde se afianzó el proyecto. Llegaban de Peñaliza, Betania, Tabaco y el Itsmo; Mariela, la niña que dibujaba parecido a Picasso; Esgar Iván quien ante sus dificultades para la danza que quería, optó por salir en el bus a hacer la ruta voceando por los caminos la Escuela a los niños y soñando cuando grande ser ayudante de Transportes Sumapaz. ¡Y vaya si practicó! Gisella Torres estaba empeñada en tener su grupo de danzas de mujeres… La audiencia crecía.

Y abajo en la escuela de Santa Rosa, los profesores y esposos Gerardo Riveros y Yenny Cruz nos abrieron las puertas y ayudaron a iniciar el semillero con los pequeños. Eran los niños de Bodegas, Taquesitos y Placitas. Oscar, no obstante su corta edad, acompañado de su hermanita, parecía un tribuno cuando como un grande, recitaba con emoción los versos del gran José Martí: “Yo quiero cuando me muera, sin patria pero sin amo, tener en mi losa un ramo de flores ¡ y una bandera! “

Así de uno en uno también, se hizo la Escuela en el Jaime Garzón. Clímaco era un niño huraño y tímido. Al comienzo se limitaba a ver los ensayos a través de la ventana. Cuando se veía sorprendido y se lo iba a invitar, corría como un conejo silvestre. Hasta que solito, de tanto mirar y tal vez envidiar, cayó en las redes. Se volvió de los más entusiastas. Un lunes lo echamos de menos en la clase de danza que era lo suyo. Al regresar nosotros a Bogotá en el “carro amarillo”, nos lo encontramos en el camino con una varita al hombro. “¿Clímaco por qué faltó a clase?” “Profe, mi mamá está de cumpleaños y fui a pescar para llevarle estas truchas de regalo”. Es que en el Sumapaz la infancia también es distinta.

El colegio Jaime Garzón en pleno participaba. El sentido deseo del rector Gerson Hernández se estaba realizando. Se creó y consolidó la banda Juvenil, los coros, los grupos de danza y de teatro. ¡Cómo olvidar ese cumpleaños del colegio en homenaje al gran Jaime Garzón -quien había sido Alcalde de la Localidad-, con sus propios actores, artistas y bailarines!

La poesía de Porfirio Barba Jacob “Canción de la Vida Profunda”, enmarcó la velada del cumpleaños en un montaje dancístico, musical y teatral con docenas de jóvenes y niños maquillados y vestidos en escena. Y ahí quedó plasmado el talento de Mauricio Flórez con sus juegos corporales, sus máscaras de luces y sus sombras chinescas. Y las marionetas, los juegos de acrobacia, la adivinanza y la magia sacadas de la maleta del mago Albeiro Melo que lo tenía todo como “el titiritero que va de feria en feria…siempre cantando… siempre bailando…” de la canción de Serrat.

Llega diciembre con su alegría y el momento de las Muestras Artísticas. Esta vez es el montaje del profesor Jaime Lara Los Niños en la Luna, con doscientos actores - estudiantes en escena. Jaime Rayo, “Jimmy” como cariñosamente se le llama, actor y cineasta, entre tramoyas, luces y sonido aplicaba su experiencia en La Mama y el Teatro Experimental de Cali - TEC- para hacer una gala impecable. César Pérez, hijo de William, ad honorem se encargaba de vestuario y maquillaje; Andrea Santos estudiante talentosa ya coordinaba la coreografía; Eliana y Clímaco danzaban.

2. Epílogo

Eran días donde todos y todas girábamos alrededor de una propuesta. El logro era colectivo. Porque esa era la Escuela. Había además gente útil y necesaria tras bambalinas. Hugo Moreno el hombre de las mil cosas, se encargaba de conseguir desde un alfiler hasta una lira. Wilson Paiva, en el carro amarillo, nos llevaba y nos traía, de amanecer a anochecer con sus vallenatos y sus boleros rancheros. Y también había interventores, proveedores, administrativos y logísticos porque se trataba de un Convenio de la Alcaldía Local con la Universidad Distrital, ésta responsable de la ejecución. Entonces a través de Miriam Varón, Alejandro Martínez, Yamile León y Guillermo Alfonso supervisaba cómo era de eso de las muchas horas y costos de transporte, constataban los distantes sitios atendidos, los cientos de niños jóvenes y adultos vinculados –con firmas y planillas- y los gastos de logística.

Entonces el IDEXUD, el Instituto de Extensión de la Universidad Distrital, veía que sí, que en un lugar a tres o más horas de Bogotá había una Escuela Itinerante, y que en medio de la neblina y el frio habían niños, jóvenes, mujeres y hombres llenos de calidez que construían sueños a través de versos, coplas, bailes; pero sobre todo, gente de ruana y sombrero que hablaba de políticas públicas, de ruralidad, de referéndum por el agua para que fuera bien público y derecho fundamental. Y también de construir patria y defender el territorio…

LMLP/rvr


miércoles, 10 de noviembre de 2010

Marcha de las víctimas del genocidio oficial contra la U. P.



Contra la impunidad y para exigir justicia, verdad y reparación marcharon en Bogotá las víctimas del genocidio cometido por el estado colombiano contra miembros del partido de izquierda Unión Patriótica UP. La movilización se realizó el viernes 15 de octubre a las 11 de la mañana como clausura de la jornada conmemorativa del Día Nacional por la Dignidad de las Víctimas del Genocidio contra la Unión Patriótica, evento que comenzó el miércoles 13 con participación de más de mil delegados provenientes de las regiones

miércoles, 13 de octubre de 2010

Memorias del Sumapaz (II)

CENTRO DE CONVENCIONES DE SAN JUAN. DÍA DEL CAMPESINO, GRUPO RENACER SUMAPACEÑO: HUMBERTO TORRES, FERNANDO SUSA, ALONSO Y ROBERTO GUZMÁN. FOTO IVÁN DARÍO ALZATE.

1.-El día del campesino

Si bien en los últimos años la palabra campesino se pronuncia con cierta connotación de respeto, allí en el Sumapaz la implicación es especial. Sus habitantes reivindican esa calidad con el orgullo de quien destaca una aristocracia: la del parentesco con la tierra, los animales silvestres y domésticos, las lagunas cristalinas, y las coronadas montañas a los lejos que les recuerda la penosa travesía de sus padres aquí culminada en la espera del sosiego.

Y a propósito de ello y de la continuación de la historia de la Escuela Artística Itinerante del Sumapaz, los sábados se dedicaba no a los niños y jóvenes de los colegios, sino a los grupos musicales de mayores. Hombres y mujeres que no por rudos campesinos dejaban de tener un sentido apego por tiples y guitarras, y el gusto por herir el aire con las tonadas de sus gargantas. El aula, el hogar de Humberto Guzmán, donde la clase giraba alrededor de Audelito y su Conjunto. Y ¿quién era su conjunto? Pues sus dos menores hijos Audel y Angélica. Allí, cosa singular, el diminutivo no lo llevaba el niño, sino el padre. ¡Y con lo bravo que es Audelito! La familia Táutiva, y no sólo este núcleo sino una ramificación de tíos, primos y sobrinos que se extiende por la provincia del Sumapaz, es toda una institución allí.

Mientras tanto, la leña se va consumiendo al igual que la tarde y entonces Guzmancito nos indica que llegó la hora del guisado de conejo que prepararon Alba, Estela y Yolanda. Guisado que tiene su historia, como en las viejas películas del Oeste que allí no vieron: no se trataba de ir al mercado –menos al supermercado- a comprar el conejo, sino de salir al monte paramuno escopeta en mano acompañados de leal y festiva jauría, y regresar los perros con los conejos en la jeta y depositarlos orgullosos en la cocina mientras reciben las palmaditas del amo. En realidad lo de la escopeta era mero decorado. “Así luce mejor, nos vemos más elegantes”, dicen maliciosos y burlones los escopeteros de Sumapaz.

Ese sábado se dan los últimos toques para el esperado debut de los diferentes grupos musicales y de baile al siguiente día, la tan esperada Fiesta del Campesino. Por la noche, la tropilla de la Escuela se queda en la casa de Nidia Sanabria y Vladimiro Morales donde se ultiman los detalles del festejo, pero a decir verdad, con esos anfitriones se adelanta la fiesta con música, comida y licor. ¡Ah! Y mucha risa. Porque la gente adusta, seria y comprometida de Sumapaz, sabe reír.

También se trabajaba; no se crea. Esa noche había que dejar decorado el Centro de Convenciones de San Juan y colgar las fotos de los líderes históricos Erasmo Valencia y Juan de la Cruz Varela, así como la pancarta del Sindicato que es la autoridad que ellos se dieron y respetan. Danielito el niño de Nidia y Vladimiro ayuda en una cosa y otra, pero eso sí, no nos la rebaja: “¿qué me trajeron?”, insiste.

La Escuela tuvo el privilegio de inaugurar con sus muestras de música, teatro y danza, el Centro de Convenciones, gran obra de la administración de Mario Upegui en convenio con la U. Distrital Francisco José de Caldas. Diseñada y realizada por Juan Carlos Ontiveros, ingeniero que plasmó en ella su compromiso con la comunidad y la cultura.

El siempre recordado Beto Poveda, quien muriera meses después de esa celebración en detención domiciliaria, instruía sobre el orden que debían llevar las fotografías. Él sabía qué y quiénes estaban empotrados en el corazón de sus gentes, y hacía de guardián de la memoria. Otros organizaban la escenografía y el sonido mientras los artistas María del Pilar Zea y Hugo Díaz Gutiérrez pintaban las totumas que llevamos para el almuerzo ese domingo en el lanzamiento de la campaña “No al uso de desechables en el páramo”.

Pero es que en medio de carencias múltiples y acosos ancestrales, en Sumapaz bulle la alegría y la solidaridad. Si no es el día del campesino, es la fiesta de Sindicato -Sintrapaz- o el bazar en solidaridad con el pueblo cubano azotado por un huracán que causó enormes destrozos. ¡Cómo olvidar la campaña “un dólar por Cuba”! Asistieron mil personas y se recolectaron mil dólares.


CENTRO DE CONVENCIONES DE SAN JUAN. FIESTA DEL SINDICATO AGARARIO – SINTRAPAZ- GRUPO DE DANZAS DE LA ESCUELA ARTÍSTICA ITINERANTE DEL PÁRAMO DE SUMAPAZ. FOTO IVÁN DARIO ALZATE
Por fin llegó el domingo, son las cinco a.m, empieza la alborada: pólvora, papayeras, cabalgatas, después vendrán las peleas de gallos, el microfútbol y la fiesta. En la tarima funge de animador el entusiasta periodista Jorge Escobar. El maestro Arlés Herrera, CALARCA, hace caricaturas de los asistentes y el escultor Alfredo Castañeda da los últimos retoques al mural hecho a dos manos con CALARCA que será descubierto ese día y que recoge la gesta de las luchas agrarias de las y los sumapaceños.

El corregimiento de San Juan, uno de los tres que conforman la localidad -los otros son Betania y Nazareth- es un bazar: hay trueque de quesos, música, libros, se cambian canciones por cervezas, poemas por tragos. Beto Baquero quien como líder sabe que toda ocasión es propicia para las buenas causas, rifa una bicicleta en solidaridad con los dirigentes presos. Matilde Mora lo que rifa es un chivo para fondos de ASODEMUC, la asociación de mujeres campesinas que lidera con Laurita Herrera; Parmenio Poveda el muy digno hijo del histórico y sacrificado Julio Poveda, hace finanzas para FENSUAGRO; Estrellita Guerrero canjea dulces y masato hechos de quinua, producto no conocido en la ciudad. Harrison Castellanos ofrece la pomada de caléndula que les enseñaron a elaborar en el Colegio Erasmo Valencia. Claro que es un comerciante muy honrado: no garantiza su producto. Después de encomiar los méritos de su pomada “que elimina el acné, quita toda clase de lunares y cicatrices, previene las arrugas y evita el envejecimiento” una vez cerrada la venta, advierte muy fresco: “¡Ah! Eso sí. Si se les mancha la jeta, yo no respondo.”

En la tarde, el acto político no puede faltar. Habla el representante de los campesinos y del sindicato. Hay vivas, denuncias, aplausos y consignas con la promesa de seguir unidos, ser solidarios y no dejarse sacar del páramo. Después viene la presentación de los grupos musicales y de baile. Elsa María quien ha venido desde Las Vegas – no las de Estados Unidos- se lleva el primer premio por sus coplas. Y por fin, los tan esperados Hermanos Escamilla, Alonso, Jairo Y Gustavo. La gente se emociona al escuchar El Barcino, El Pueblo Unido, Simón Bolivar Simón….la euforia va en ascenso. Y para cerrar la fiesta y bailar hasta el amanecer, suben al escenario el muy querido Henry Mora con su grupo “Agua y Cañizo” representativo del sentir musical del Sumapaz, Pedro Rincón con sus vibrantes pasajes llaneros, Konny y Orlando inconfundibles voces fiesteras, la guitarra del coplero de Ánimas Altas Henry Pinzón, y el hombre del cuatro, el bajo y la guitarra, el sonriente Aldemar Pérez.
A propósito, de Agua y Cañizo, en una de las aventuras de la Escuela lo acompañamos al famoso Festival de la Tagarnia en Salento - Quindío donde fueron invitados, allí su música fue muy aplaudida y bailada, el Sumapaz quedó muy bien representado.

2. En el Erasmo Valencia
La Escuela continúa su itinerancia, colegio Erasmo Valencia, en homenaje a otro legendario luchador por la tierra y defensor de los campesinos del Sumapaz. Encontramos, siempre atento a la puntualidad de la Escuela al profesor Rafael Riveros, hombre serio y disciplinado, orgulloso de su docencia, cultiva la huerta escolar con su esposa y sus dos pequeños hijos. Y comenzaba el agite de flautas y clarinetes con Gustavo Escamilla en el ensayo de instrumentos de viento; de tambores y timbales de los percusionistas con el profe Jaime Lara; más allá los aprendices de ilusionistas con Alejandro Botero adentrándolos por el mundo del cine y los malabares que traía de sus correrías por otros continentes. Juan Carlos García se sintonizaba con los niños de preescolar en la gracia de las rondas infantiles. Ya en la noche, el turno era para la nocturna, comenzaba de nuevo el jolgorio y la alegría. Nubia Prieto, Néstor y los otros…Eran miércoles de Escuela.



BANDA MUSICAL COLEGIO ERASMO VALENCIA. FOTO IVÁN DARIO ALZATE

Pronto se veía la banda musical completa; las bastoneras en primera fila: Balbina Peñaloza marcaba la pauta para empezar el Himno a la Alegría. Manuela Delgado muy seria, daba la nota con su lira; Angélica Táutiva con la trompeta y Yeisson Castellanos con el tambor. Luego de la práctica a satisfacción de los instructores, el descanso en la tienda de Fidel escuchando los relatos sobre su padre; hasta que llegaba Alfredo Díaz el cuentero mayor y como decía él, “llegó el comandante y mandó a parar”. Siempre tiene un cuento para cada ocasión adornado con notas de humor. Y para terminar, canta su canción “Agua, Cañizo y Romero” seguido por los profes Lara, Escamilla y Rafael.

Había que continuar la correría y entonces subíamos camino a Tunal Alto, Pero una parada antes no sobraba, saludar en Lagunitas al músico Carlos en su “casa estudio”, sitio de encuentro del grupo de Moisés Delgado “Voces de Libertad”. El carro amarillo –así fue identificado el campero de Alvaro Moreno que transportó a la los docentes-, continúa su marcha, mientras lloran las notas de María Dolores Pradera con su “Veredita Alegre”.

El luminoso atardecer nos decía que ya habíamos llegado a la cima de Tunal Alto. En la cancha de la escuela los músicos espantan el frío primero jugando un partido de microfútbol. La clase comienza con las coplas y cuentos de Fernando Susa y su miedosa “Historia de la Candileja” que él dañó con todo y leyenda, porque es tan intrépido que –según él-, la enfrentó y la apagó. Luego el ritual de templar las guitarras, Roberto y Alonso Guzmán con su acento llanero dan un aire distinto a las canciones. Humberto Torres quien recién ha terminado de pegar ladrillos, hace susurrar la guitarra como cualquier Paco de Lucía. Ellos son “Renacer Sumapaceño”, hombres que cultivan la tierra, construyen caminos, levantan paredes, pero también están enterados de que en efecto, “otro mundo es posible”. Entonces, lideran la acción comunal, el sindicato, comités varios, etc. Se organizan y participan.

jueves, 7 de octubre de 2010

Acto Conmemorativo.- Primer aniversario María Paulina Ruiz


16 de octubre.-Hora: 5:30 pm.-

Lugar: Instituto León Tolstoi calle 14 No 3-85
Invita Casa Colombiana de Solidaridad con los Pueblos

viernes, 10 de septiembre de 2010

Memorias del Sumapaz (l)

ESCUELA DE SAN ANTONIO, GRUPO MUSICAL AIRES, RITMO Y SON: ANIBAL MONTAÑEZ, ADRIANA, PEDRO, PACHITO, OLIVO Y ALFONSITO. FOTO IVAN DARIO ALZATE.

Por: Luz Marina López Espinosa

Si la gratitud es la memoria del corazón que dijera el poeta, hay memorias que son deudas que es preciso pagar para conjurar los fantasmas de la ingratitud y el olvido. Prestos ellos a borrar del recuerdo las mejores obras y los mejores hombres, cuando unas y otros no responden al interés de quienes codiciosos, se apropiaron de la bella inmensidad del mundo. A despecho de lo ancho y ajeno que otro poeta cantara.

Y por esos imprevisibles y paradójicos caminos de la vida, fue la lujosa vitrina de un gran aeropuerto donde se exhibía un nuevo licor, el exclusivo “Juan de la Cruz”, la que produjo el milagro de traer a la mente lo que ella se tenía bien guardado como si ya estuviera en las garras del impío fantasma.

Esa vitrina me remontó entonces al gran líder campesino, y estar ahí fue uno con el Sumapaz y su frío y la historia y lucha de sus gentes. ¡Sí! Había que cancelar la deuda.

Entonces, como una película que lenta pero tumultuosa pasara ante mí, vi rostros y escenas que en los últimos años había descubierto y admirado: niños que sin dejar de serlo trabajaban, reían y bailaban como mayores; mujeres solidarias y laboriosas; hombres rudos y valientes que tocaban guitarra; paisajes no imaginados, águilas lentas e imponentes, conejos silvestres, lagos donde se podía tomar agua pura, nubes a ras del suelo y mucha música.

En una mañana de febrero de 2006 fría y lluviosa como todas, con un grupo de docentes de artes de la Universidad Distrital Francisco José de Caldas llegamos al colegio Juan de la Cruz Varela, vereda la Unión, corregimiento San Juan en la localidad de Sumapaz. Nos recibió un señor de sombrero, ruana y botas pantaneras como un campesino más, quien resultó ser el rector Aníbal Montañez. Le hablamos de la propuesta pedagógica que traíamos por convenio con la alcaldía de la alcaldesa Magnolia Agudelo, y que queríamos concertarla con la comunidad. Escuchó atento, nos reunió con los profesores y concluyó diciéndonos que su sueño era ver consolidado un grupo de música en la vereda. “Ahí están esos muchachos y muchachas… miren a ver, ¿cuándo empiezan?”

Las puertas del Juan de la Cruz Varela quedaron abiertas desde ese momento para nuestra Escuela. Que así se llamaba el Convenio: Escuela de Educación Artística, que por manes del aire nómada que tomó ante la acogida que tuvo por la población del inmenso territorio, terminó llamándose Escuela Itinerante del Páramo. Sí. Porque a veces era como una caravana de gitanos.
A partir de ese momento hubo una gran cercanía con Aníbal quien personificaba el alma alegre, comprometida y hospitalaria de esa población. Nació el grupo “Aires, Ritmo y Son”, del cual él hacía parte. Se iniciaron las clases no solamente en el colegio sino en las casas, patios y tiendas del lugar. La danza, el teatro y la literatura fueron parte de esa aventura que niños, jóvenes y adultos hicieron suya con la emoción que hubo de sentir Aureliano Buendía en los días de su infancia cuando su padre lo llevó a conocer el hielo.

En la casa de Pedro Díaz y Adriana hacíamos clases de música y composición al lado de la hornilla con un tinto hecho en vasija de barro por su mamá . Los maestros de la guitarra Alfonsito y Tato, la voz tropical de Adriana a quien el amor importó al páramo y los vallenatos militantes de Olivo Meneses, eran el marco práctico de las enseñanzas. Noches de ensayos y tertulia donde Luis Alfredo Romero y sus relatos del Pedregal y el Duda llenos de aventuras con papagayos, micos y ríos cristalinos. Él iba hasta esos parajes con sus mulas en travesías de días llevando quesos y víveres. En las noches parecía abrirse la bóveda del cielo para acompañarlo con visiones y prodigios que sólo desde allí se podían contemplar, por nunca jamás. ¡Ah! Y todas las historias adobadas como es riguroso en estas gentes, con episodios donde se revelan sus convicciones, amén de una sabiduría adquirida en la resistencia a ancestrales injusticias.

La tienda de Jacobo…. Más que tienda, era un lugar mágico, de esos ya desparecidos donde se vendía la pomada para los nuches del ganado, botas de caucho, ollas Imusa, salchichón cervecero –y cerveza claro-, machetes y el Almanaque Bristol con sus historias a ocho cuadros. Allí se reunía el pueblo sin convocatoria alguna. Música, coplas y teatro. ¿Para qué más? Bueno, sí había más, el profe Jaime Lara “maestro de ceremonias”, ponía un punto alto con sus imitaciones y su música. Lo malo, afuera un grupo de soldados miraba desafiante, ofendidos de que pudiera haber tanta libertad y alegría cuando ellos habían decretado inapelable, el toque de queda en el gran páramo. La noche tenía dueño. El hogar de Carlos Macana era el refugio después de las jornadas de trabajo. Allí anochecía y amanecía temprano.

De esas tertulias arrancó la propuesta que tanto impactaría, la de Escuela Itinerante. Se amplió su cobertura y llegaron más maestros artistas: Pacho Martínez actor del teatro la Candelaria, director él mismo, quien llevó obras como La Maestra y Los Comunes y predicó sobre el teatro popular; Fernando Ovalle aclamado bailarín y profesor de danza contemporánea, Iván Dario Alzate con el ojo del artista y su cámara guardando para la historia instantes y movimientos; Camilo Orozco el hijo de Armando e Isabelita, entre temperas y pinceles jugaba con los niños a reconocerse, con el ejercicio de pintarse ellos mismos.; Ciro Becerra joven historiador barranquillero, ya llegado al frío, se atrevió con el páramo, en camiseta como si estuviera en la Arenosa. Hoy desde España donde estudia, envía cantos de nostalgia por esos días en el Sumapaz; Jacqueline Vega la folclorista con su famoso grupo Usaka de danzas tradicionales, nos acompañaba en ferias, fiestas patronales, día del campesino y de la virgen del Carmen. La Unión, La Playa, La Granada, Santodomingo, Las Vegas y San Juan la vieron pasar con su tropa danzante.

Inolvidable una escena como de la película Fitzcarraldo del alemán Warner Herzog donde narra el delirio del hombre al que le dio por llevar la ópera a la selva amazónica. Allí en el Sumapaz era la música, la danza, la poesía; y no es tampoco que fuera al Amazonas, sino a la escuela de San Antonio a 3.400 mts. sobre el nivel del mar por empinada y enfangada trocha. Ver ese desfile de caballos cargados de sonido, guitarras, tambores, los aparatosos vestuarios y cajas de cerveza, y los pobladores que por el camino se iban sumando “porque llegó la escuela”, era lo más parecido a una caravana circense: cuenteros, bailarines, poetas, mujeres, ancianos y niños por la montaña hasta coronar la cima. Y allí el gran dirigente Graciliano Diaz caminando desde el Toldo entre el barro y la lluvia con su pequeño hijo en hombros, animando la marcha… Y todos alegres. Eran sábados de cultura, solidaridad y estrechamiento de vínculos. Y una vez encaramados tan alto -sobre todo para los que veníamos de la ciudad-, se bailaba carranga, ranchera y salsa. El profe artista William Pérez sorprendía con la salsa y sus ritmos peruanos. Como si estuviéramos en el mismísimo Machu Pichu. Al bailar “La Saya” nos recordaba a los cosacos de las estepas siberianas. La noche la cerraban los juglares Betto Villalobos autor de docenas de canciones inéditas con los legendarios Mensajeros de San Antonio.

Y recordando a Los Mensajeros, la cita era los sábados en la vereda el Toldo en casa de Luisito Bustos con María Antonia y sus hijos. El ambiente y decorado era como el de uno de esos maravillosos mesones medioevales que vemos en las películas. Los Prieto –Tulio y Jaime- con sus guitarras al hombro siempre acompañados de Mireya y Nubia no querían dejar de cantar. La próxima parada en la casa de Humberto Guzmán “Gusmancito” a ensayar con Audelito y su Conjunto. Es que la Escuela era una fiesta. Amanecía y como en la canción de Serrat “… vamos bajando la cuesta que arriba en Sumapaz se acabó la fiesta”.

Abril y con él día del idioma …Y quien lo creyera, la poesía llenaba la cancha de colegio hasta la media noche. Los poetas llegados de Bogotá como Juan Manuel Roca y Mery Yolanda Sánchez apreciaban el silencio durante las lecturas y charlas. Nuestros aprendices de literatos conducidos por John Jairo Montiel, hacían su debut. El niño Andrés Felipe Palmito ofrecía sus coplas y rancheras que hablaban de tiros y traiciones; Helber cultivaba y con gran desparpajo ofrecía su poesía. Violeta, la niña de los girasoles que desde el profundo sur de Colombia había llegado al remoto páramo, le cantaba a las flores que espigaban en Abril. Jenifer, nos decía de la vida y el calor que guarda en sus entrañas el noble frailejón. Haggi Montañez bailaba y Juanchito Romero daba los últimos toques al graffiti. Eran recitales como los de cualquier Casa de Poesía.

Para los docentes del colegio, la digna celebración de ese día era cuestión de honor. Briceida iba de un lado a otro con la programación haciendo que todo se cumpliera para que Cervantes no echara de menos nada el día de su santo. ¡Faltaba más! Clarita, programaba los horarios de los grupos de la Escuela Artística; Domitila atendía la logística; Juan Carlos Wilches el profesor de educación física, trotando para que saliera bien la travesía por las musas bajo la mirada severa y tragicómica de Don Quijote y Sancho Panza en el mural que hicieron los muchachos.

Llega noviembre, cumpleaños del colegio, semana cultural y la alegría de las prontas vacaciones. Había de todo incluido Encuentro de Música Campesina, y ahí otra vez el entusiasmo del rector Aníbal, ese Arquímedes que todo lo sabía y parecía tener la solución a los problemas antes de que se presentaran. Llegaban músicos de Pasca, Cabrera, Pandi, San Bernardo y por supuesto los anfitriones. En estos Encuentros no se competía, era para reencontrarse en una historia común cuando sus padres y abuelos llegaron a la región y allí se hicieron fuertes, huyendo de persecuciones que aún no cesan.

Y siempre, Alirio Rey cuyo tranquilo talante hizo realidad el memorable verso de Luis Vidales: Los relojes pierden el tiempo. Y si no era Alirio, Alberto, Joaquín o Evangelio. Los Rey Montañez fueron parte de esa aventura porque estaban en todo como devotos hijos del páramo. Son parte de la historia del Sumapaz desde su infancia en San Antonio cuando recorrían trochas y cruzaban ríos para ir a estudiar a Pasca.

De regreso a Bogotá, despistábamos el frio apostando al que más viera los conejos que atravesaban el camino. Había que frenar para no atropellarlos porque se paralizaban con las luces de las farolas. Hay que ser campesino para entenderlo. Cuando nos traía Evangelio, soñaba estar realizando su gran ilusión, y suponiendo el campero un auditorio lleno de fans, interpretaba a grito herido “Y nos dieron las diez” de Joaquín Sabina. Su inseparable Doris Mora esa sí fan real, aplaudía con emoción y gritaba: “Otra, otra, otra….”

Pronto divisábamos las luces mortecinas y tristes de los barrios pobres de la gran ciudad….

martes, 7 de septiembre de 2010

Hace 14 años sucedió la masacre de Mondoñedo


Resumen masacre de Mondoñedo

“Los hechos que dieron origen a la presente investigación tuvieron ocurrencia los días seis y siete de septiembre de mil novecientos novena y seis, cuando los hoy occisos: VLADIMIR ZAMBRANO PINZÓN, JENNER ALFONSO MORA MONCALEANO, JUAN CARLOS PALACIOS GÓMEZ, ARQUÍMEDES MORENO MORENO, FEDERICO QUESADA y MARTÍN ALONSO VALDIVIESO BARRERA, salieron de sus casas con rumbo a la “bolera” el Salitre donde tratarían asuntos relacionados con su seguridad, ante el seguimiento que se les estaba haciendo por parte de miembros de seguridad oficiales con la finalidad de atentar contra sus vidas. Al día siguiente, los familiares de los ya citados ciudadanos, tuvieron noticia de su muerte en la vereda Fute ubicada en la vía que conduce de la Población (sic) de Mosquera a Soacha y a la Mesa, sitio denominado “Alto de Mondoñedo”, donde en efecto hallaron los cuerpos de los cuatro primeros y los dos últimos muertos en la horas de la mañana del día siete de septiembre, en el Barrio (sic) Argelia de Kennedy QUESADA y VALDIVIESO BARRERA en la jurisdicción de Fontibón, por sujetos que se movilizaban en una camioneta roja doble cabina y como quiera se presumió cierta relación con los primeros muertos se unificó la investigación.


El 6 de septiembre de 1996, seis personas fueron retenidas por la DIJIN de la policía: fueron secuestrados y finamente incinerados en el basurero de Mondoñedo, ubicado en las afueras de Bogotá. Una de las víctimas, Jenner Alfonso Mora Moncaleano, estudiaba en ese momento último semestre de la Licenciatura en Física en la Universidad Distrital, donde desempeñaba su rol político al igual que los demás compañeros, todos militantes de la Unión Patriótica; el exterminio a la UP tocó la propia base. Durante el pasado Foro Social Colombia, tuvimos la oportunidad de entrevistar un miembro del Movimiento Nacional de Víctimas Crímenes de Estado, conocedor de primera mano de la llamada masacre de Mondoñedo, pues era cercano a Jenner Alfonso Mora, y quien solicitó omitir su nombre.

¿Nos puede comentar en detalle, cómo se perpetró el crimen en 1996?
El 6 de septiembre de 1996 fueron capturados sin orden escrita, de toda autoridad competente, las siguientes personas: Jenner Alfonso Mora Moncaleano, Juan Carlos Palacio Gómez, Vladimir Zambrano Pinzón, Arquímedes Moreno Moreno, Federico Quesada y Martín Alonso Valdivieso Barrero. Fueron capturados por miembros de la DIJIN, de la policía nacional en Bogotá, sin tener ninguna orden de captura expedida por alguna autoridad competente, lo que quiere decir que fueron secuestrados, fue un clásico secuestro. Fueron conducidos a las instalaciones de esa dependencia; eso ocurrió a las 11 de la mañana, según testigos.

¿Dónde ocurrió el hecho, dónde fueron capturados?
Se dice que fue en la bolera del Salitre, donde algunos de ellos estaban jugando, pues, bolos. Entonces, los llevaron a alguna dependencia oficial y los torturaron para conseguir seguramente alguna información, y dar, o presentar, alguno de esos que se llaman los falsos positivos. A estos muchachos los habían denunciado ante la DIJIN Bogotá un sujeto que se llamaba Carlos Julio Chaparro Nieto, y los había sindicado de pertenecer a la red urbana de las FARC en Bogotá, y más concretamente, de ser los responsables del asalto al cuartel de la policía de Kennedy ocurrido un año antes. Este sujeto, Carlos Julio Chaparro Nieto, era informante a sueldo de la DIJIN; y los señaló como miembros de esa agrupación porque Vladimir Zambrano Pinzón le había quitado su novia, y en un arranque de celos y de venganza, le quedó muy fácil dar una información falsa. Esto hizo que fueran capturados. Después de ser torturados tremendamente de una manera miserable, los llevan al basurero de Mondoñedo, y allá les dan muerte; y los incineran para que no fueran reconocidos, lo que está indicando que ese grupo policial no estaba cumpliendo ninguna orden legal, porque si hubiera sido así no hubieran tenido necesidad de hacer esa cosa que hicieron.

¿Las víctimas eran estudiantes universitarios con alguna actividad política?
Sí, algunas de las víctimas eran estudiantes universitarios, por ejemplo Jenner Alfonso Mora Moncaleano era estudiante de último semestre de licenciatura en física en la Universidad Distrital; y también sé que Vladimir Zambrano Pinzón también cursaba estudios universitarios en la misma universidad. Los otros eran jóvenes que se conocían entre sí, porque todos pertenecían al movimiento político de la Unión Patriótica.

¿Este caso es atribuible al magnicidio de la Unión Patriótica o un hecho que no contaba con los mismos móviles?
Esto hace parte de la política de exterminio de la Unión Patriótica, y exterminio de todas las formas de lucha social; y es acá donde está lo grave, que los organismos de seguridad del Estado toman como información cierta cualquier cosa que les diga un informante que va a cobrar unos pesos, y se proceden a cometer esta clase de crímenes. Lo grave no es que los cometan, sino que el propio Estado los proteja, porque este crimen solamente cuenta con tres policías de baja graduación que fueron condenados a penas de cuarenta años, y los demás (un capitán que ya está retirado, otro capitán que ya es, me parece, teniente coronel) andan totalmente libres dentro de la institución, como si nada hubiera pasado.

Respecto a las penas proferidas por el crimen, ¿la policía, aparte de las condenas que rondan los cuarenta años para policías de mandos medios, como usted comentaba, qué ha dicho, qué ha investigado, se ha pronunciado respecto al caso? Los policías siempre han negado los hechos, y cuando se dieron cuenta que esta gente iba a ser investigada y que era posible que los detuvieran, los fueron dando de baja a voluntad propia, les fueron pagando las cesantías y toda la cosa que se debían para colocar tierra de por medio, lo que se constituye como una prueba de connivencia que hay en sus manos, en la policía; y de quienes ejecutan esa clase de masacres.

Ya han pasado casi 12 años después del crimen, ¿cómo es la vida del papá de Jenner, de la familia, qué ha sucedido en toda esta década?
Pues los padres de los muchachos, todos, no solamente el papá de Jenner, que se encuentra asilado en España, sino de todos los padres de las demás víctimas, pues les cambió la vida, les cambió su proyecto de vida, la ilusión que cada familia tuvo en que esos muchachos fueran su sostén, ya no la tienen, y sobretodo es criticable, muy criticable, el comportamiento de la Procuraduría General de la Nación, especialmente de este actual procurador que habla tanto de campañas contra la corrupción, de justicia, de control; es criticable que ese mismo procurador, el doctor Edgardo Maya Villazón, ese señor, tuvo el cinismo (porque no se puede llegar a decir de otra forma) de revocar una resolución por la cual miembros de esa misma Procuraduría, después de investigar los hechos, habían sancionado con la destitución del cargo a los oficiales que cometieron el crimen; llegó y revocó la resolución de sanción, de la destitución, y los dejó sin cargo alguno. Es decir, éste fue uno de los principales elementos que ha dejado el crimen en la impunidad, hasta por la parte disciplinaria; y no digamos de la Fiscalía; solamente donde ha habido justicia ha sido en la parte de los jueces, pero como primero tienen que pasar las investigaciones por la Fiscalía, la Fiscalía no ha hecho nada, totalmente nada, entrabar las cosas no más.

En un caso concreto, ¿los directivos de la Universidad Distrital como tal, promovieron alguna investigación, dijeron algo, en el caso particular de Jenner Mora y Vladimir Zambrano?
Los directivos de la universidad no hicieron ninguna campaña, porque entiendo que no tuvieron conocimiento de los hechos, parece que hasta ahora no tiene conocimiento. Simplemente los muchachos dejaron de asistir a sus clases y nada pasó. Entiendo que ningún pariente, ningún familiar, suministró algún tipo de información, por lo tanto las directivas universitarias no saben nada de eso, y si no la saben pues tampoco se han podido pronunciar.

¿Algo más para agregar en este punto?
No, simplemente que se le pide al gobierno, a este gobierno que habla tanto de derechos humanos, a este gobierno que, como todo el mundo, se aterra con el secuestro, decir que el secuestro no solamente es para unos; el secuestro es un crimen que se comete para todo, para otros; es que es tan grave para el rico, como para el pobre; para el estudiado como para el que no es estudiado; para el alto como para el bajito; para el gordo, o como para el flaco. Es secuestro es secuestro, y sin embargo eso no le preocupa, porque son crímenes que los comete el propio Estado, y éste los niega, los desconoce, dice que no, que aquí no se cometen crímenes de este lado, y sí, acá un movimiento que se llama Movimiento Nacional de Víctimas Crímenes de Estado, que está interesado en que la gente sepa que el Estado también es terrorista, como son terroristas las FARC, el ELN, los paramilitares y los narcotraficantes.

Por último, ya que toca el tema del secuestro. Hay una marcha programada para el 4 de febrero que se titula “Un millón de voces contra las FARC”, ¿qué opina de esta marcha que principalmente es promovida por el Estado?
A mí me parece que la marcha es buena, tratándose en que se va a protestar contra uno de los crímenes de lesa humanidad, que es el secuestro, pero me parece malo que la esté utilizando el Estado para mejorar su imagen, y para decir que ellos no violan los derechos humanos. Por ese motivo, el Movimiento Nacional de Víctimas de Crímenes de Estado no participará en esa marcha, porque no va a hacerle propaganda a un Estado que ha cometido tantos crímenes y que los está negando.

Pruebas de la barbarie: Jenner Alfonso Mora Moncaleano, estudiante de la UD, antes y después de ser secuestrado y torturado, las imágenes pueden herir susceptibilidades, pero las publicamos con autorización expresa de sus familiares que se comunicaron desde España:

jueves, 2 de septiembre de 2010

Siete órdenes de captura por falso positivo en los Montes de María.


Por: Comunicación Alternativa Popular para la Paz.

El ocho de Febrero de 2008, Patricio Flórez Severo un humilde campesino de la vereda Tierra Grata en Carmen de Bolívar, se desplazaba en un pequeño jumento en compañía de unos familiares a una finca vecina a ganarse el jornal recogiendo la cosecha de aguacates.

De pronto se oyó una balacera, y Patricio cayó mortalmente herido al igual que el animal. Sus acompañantes huyeron al caserío de Tierra Grata, y al ver que Patricio no llegaba, temieron lo peor. Entonces, armados de valor y sus instrumentos de labranza, salieron en su búsqueda al lugar de la balacera. Allí, tropas de la Primera Brigada de Infantería de Marina de Corozal les cerraron el paso y les dijeron que no se preocuparan, que su amigo estaba bien. Ante la insistencia de los campesinos en seguir porque sabían que les estaban mintiendo, las tropas hicieron numerosos disparos al aire amenazando con que los próximos serían contra sus humanidades. Los valientes campesinos no se amedrentaron: los Infantes de Marina huyeron ante la arremetida de la población. Uno se cayó, el cual fue retenido por el pueblo con todo y fusil.

El Comandante del batallón de Corozal se hizo presente en la zona, amenazando a la población con proceder militarmente si no entregaba al infante. La presencia de la defensoría del pueblo y de la personería salvó la situación. Se supo entonces que Patricio Flórez efectivamente había sido asesinado, que la escena había sido manipulada, su cuerpo “cargado” con pertrechos militares y llevado en helicóptero al batallón, con lo cual la importante diligencia de inspección del cadáver in situ, se perdió para la investigación.

Tanto el Comandante de la I. Brigada de Marina como el del batallón de Corozal, emitieron comunicados donde daban cuenta de la muerte de un narcoterrorista de las Farc en un fiero combate al emboscar a una patrulla en la convulsionada zona de los Montes de María. En este mismo falso sentido oficiaron a las autoridades penales y disciplinarias que asumieron la investigación. Igualmente, formularon denuncia penal contra los dirigentes comunales de Tierra Grata por secuestro, hurto y asonada. Siga..

La comisión interamericana de derechos humanos (CIDH), otorga medidas cautelares a favor de 179 familias campesinas

de las veredas el Vergel y el Pedregal del municipio de Caloto-Cauca

A través de la Corporación Justicia y Dignidad, 179 familias campesinas El Vergel y El Pedregal de Caloto Cauca, solicitaron a la CIDH, la protección de su derecho a la vida, la integridad personal, así como el derecho a retornar a su territorio en condiciones de dignidad ante las graves violaciones a los derechos humanos e infracciones al derecho Internacional Humanitario que se han venido presentando en sus territorios durante 2009 y 2010.

Múltiples han sido los daños ocasionados por el Ejercito Nacional en contra de las beneficiarios de las medidas cautelares, entre los que se destacan atentados en contra de la integridad personal, a la libertades y la destrucción de bienes civiles en medio de combates entre el ejército y la guerrilla. Los campesinos MILEYDI MORENO RESTREPO y sus menores hijos, fueron secuestrados por efectivos militares y trasportados en helicópteros artillados hacia un departamento vecino; Igual suerte corrió JOHN JAIRO TORRES MONTES, quien fue vendado, esposado y acusado de guerrillero y fue objeto de ofrecimiento de que se vinculara al programa de reinserción. Siga..

Violaciones a los Derechos Humanos de las personas privadas de la libertad en el Barne Tunja.

Por no recibir alimentos se obligó a los detenidos del Pabellón 8 a dormir a la intemperie.
La Fundación comité de solidaridad con los presos políticos, denuncia a la comunidad nacional e internacional los siguientes.

HECHOS:

El día de hoy, 01 de septiembre de 2010 , los detenidos del Pabellón 8 del establecimiento carcelario de mediana seguridad conocido como El Barne, llamaron para informar que en el curso de este año han venido expresando de forma respetuosa y siempre pacífica, su inconformidad por el reiterado incumplimiento del contrato de alimentación, habida cuenta que se les hace entrega de raciones de comida que no cumplen los estándares de gramaje y calidad. Afirman que de dicha situación habían informado a la administración del penal, a través de personal de guardia con quienes tienen un contacto más directo. Siga..